Mientras viajaba, prometí que lo primero que haría al volver a Chile sería salir a bailar, incluso en la primera semana esto se escribía en las bocas de bastantes chilenos que se encontraban en el Jamboree (más en mujeres que en los hombres), ya aburridos de la plana música de los europeos, entre "we are the champions", "YMCA" y tecno carente de cualquier sabor latino, grite durante todo el viaje a los cuatro vientos que en cuanto volviera a Valdivia iría a bailar, cosa que extrañaba hacer, ya que era común verme bailando en el 691 al menos un día en el findesemana.
Llegue a mi ciudad, con sorpresas varias (ni mi familia sabía que llegaba ese día), y quedamos que el jueves saldríamos a bailar con mis amigas, pero no me percate que realmente estaba cansada y que cuatro días durmiendo mal me estaban pasando la cuenta; así que me he quedado dormida, desperte pensando que había salido y que había tenido un apagón de tele impresionante, que ni me acordaba como había vuelto a casa, despues de realmente despertar me he dado cuenta que ni siquiera me acordaba que había salido, pues así era: caí directamete a los brazos de morfeo antes de cualquier cosa.
Al día siguiente fue lo mismo tempranito caí en los laureles; así que todavía no he podido curar mi deficit de baile (el sábado se celebró el cumple de la silvi).
Mientras el fin de semana llega solo queda esperar no más: Juan Luis Guerra me espera en la pista de baile. jajajajaja
miércoles, 29 de agosto de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario